Las estrellas de Hollywood con dientes blancos, relucientes y perfectos a menudo es porque lucen carillas en los dientes.
¿Qué son las carillas dentales?
Las carillas dentales son un tipo popular de odontología cosmética, son «cubiertas» delgadas, con forma generalmente diseñada para la parte frontal de los dientes. Son una solución mucho menos invasiva para los dientes manchados, astillados, torcidos, deformes y con huecos.
Un estudio midió la satisfacción del paciente dental con carillas, donde se solicitó a los pacientes que completaran los cuestionarios al momento de la colocación de las carillas. Un año después, la satisfacción del paciente desde el principio fue del 76 por ciento y en dos años, fue del 78 por ciento.
Las carillas comparten similitudes con las uñas falsas, que las personas pegan en su lugar para que las uñas se vean largas y perfectas.
Estas básicamente hacen lo mismo con tus dientes, ya que pueden cerrar los huecos que existen entre los dientes, hacer que los dientes parezcan rectos y ocultar manchas.
Las carillas solo duran de 10 a 15 años, eso es porque pueden ser víctimas de los mismos problemas que sufren los dientes reales, ya que estas pueden astillarse, agrietarse y mancharse.
Pueden ser una solución ideal para aquellos problemas dentales provocados por diferentes casuísticas, como un exceso de azúcar, problemas de alimentación o hábitos como el tabaco.
¿Cómo se colocan las carillas?
El dentista eliminará algunas capas del esmalte de los dientes en su parte frontal, para prepararlos para las carillas. Este es un cambio permanente, ya que el esmalte no vuelve a crecer. Una vez que se elimine el esmalte, tendrás que tener siempre carillas.
Si buscas carillas dentales, debes estar preparado financiera y emocionalmente para reemplazar las carillas varias veces a lo largo de tu vida.
En un artículo publicado en Faculty Dental Journal (FDJ,), se destaca la preocupación de los dentistas sobre el uso de coronas y carillas dentales de porcelana debido a los problemas a largo plazo que pueden sufrir los pacientes con estos tratamientos.
Y es que varios estudios afirman que la destrucción de una estructura dental relativamente sólida, como es el esmalte y dentina, para preparar los dientes para carillas o coronas raramente puede justificarse a problemas cosméticos o de desgastes.
Las investigaciones disponibles sugieren que después de 10 años, alrededor del 50% de las carillas ya no están presentes, han recibido tratamiento adicional o ya no se encuentran en un estado satisfactorio.
También hay dentistas que están preocupados porque la colocación de carillas o coronas de porcelana, principalmente en dientes sanos. Se ha extendido tanto que a veces se considera un tratamiento «normal» para aquellos pacientes que podrían beneficiarse de tratamientos restaurativos más moderados, como el blanqueamiento y unión.
Y es que informar al paciente antes de hacer un cambio, es algo vital para la planificación del tratamiento: «Cada paciente es diferente y mientras las carillas son un tratamiento apropiado para algunos casos, en otros no lo son.
A fin de garantizar tratamientos adecuados, las decisiones se deben tomar entre el dentista y el paciente. Siempre sobre la base de una comprensión completa de la gama de opciones disponibles y sus implicaciones”.