Los padres deben saber lo sencillo que resulta que sus hijos se enfermen, principalmente si alguna enfermedad existe en la escuela o guardería a la que asisten y es que la mayoría de los niños se encuentran expuestos a enfermarse, sin embargo, a lo que se teme es al hecho de que existe una enfermedad, la cual es mucho peor que un resfriado común.
¿Qué es la fiebre aftosa?
Los especialistas están pidiendo a los padres que se eduquen acerca de la fiebre aftosa humana, la cual también suele ser llamada exantema vírico de manos, pies y boca o HFMD, debido a sus siglas en inglés, para que ellos logren reconocer sus síntomas y la traten.
La enfermedad de manos, pies y boca es un padecimiento viral el cual afecta con mayor frecuencia a bebes y chiquillos que tienen menos de 5 años, aunque igualmente puede afectar a los adultos.
Esta enfermedad está afectando alrededor de 200,000 estadounidenses anualmente y es que generalmente, empieza con fiebre, poco apetito y un fuerte dolor en la garganta.
Después de 1 o 2 días y después de haber empezado la fiebre, comienzan a aparecer llagas dolorosas alrededor de la boca.
Estas empiezan como pequeñas manchas rojas que surgen en el área posterior de la boca y luego empiezan a volverse ampollas y en algunos casos llegan incluso, a volverse úlceras. También se desarrolla una erupción en la piel donde aparecen unas manchas de color rojizo, además de ampollas; prácticamente también aparece tanto en las palmas de las manos como en las plantas de los pies.
¿Dónde se desarrolla la fiebre aftosa?
Del mismo modo puede desarrollarse en las rodillas, los codos, las nalgas o en la zona de los genitales.
La fiebre aftosa podría originar a que el niño que la padece se deshidrate, debido a que se le hace muy difícil tomar agua, ya que le resulta muy doloroso el sólo hecho de tragar líquidos, por las llagas que aparecen en la boca.
Esta enfermedad es realmente contagiosa, ya que incluso llega a propagarse sencillamente por tener contacto con fluidos corporales, es por esta razón que es tan usual que se desarrolle con gran frecuencia en los colegios y guarderías.
Los síntomas más frecuentes que presenta la fiebre aftosa son los siguientes:
• Dolor en la garganta.
• Fiebre.
• Erupción de manchas rojizas y ampollas en manos y pies.
• Disminución del apetito.
• Irritabilidad.
Prevención
Para minimizar los riesgos de padecer la fiebre aftosa humana, tú y tus hijos deben mantener una buena higiene. Para eso te recomendamos:
• Lavarte las manos frecuentemente, especialmente luego de haber cambiado los pañales de tu bebé o ir al baño.
• Lavar y desinfectar las áreas que suelen ser tocada de manera constante.
• Lavar y desinfectar habitualmente los juguetes de tus hijos.
No existe tratamiento para esta enfermedad, sin embargo, se exhorta a guardar mucho reposo y tomar abundante líquidos.